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lunes, 1 de abril de 2013

Dime que dices a mis espaldas y te diré quien eres

Se critica mucho a programas del estilo de Sálvame o del estilo del ya desaparecido Aquí hay Tomate. ¿Pero alguien se ha parado a pensar por qué triunfan este tipo de programas?

La respuesta es muy sencilla: hay un gran número de personas (te llegarías a sorprender de lo numeroso que es) que sólo disfruta hablando de la vida de los demás. A este tipo de personas se las puede considerar como cotillas o chismosas.

Lo más gracioso de todo es que cuando esas personas (las cotillas/chismosas) se ven imposibilitadas para hablar sobre la vida de los famosos por la razón que sea, lo que hacen es expandir su radio de acción y empiezan a chismorrear sobre las personas más cercanas a sus vidas, con independencia de que las conozcan o no. Da igual que sean compañeros de trabajo, compañeros de clase, vecinos o cualquier otra persona conocida. Da igual que sea una persona a la que no se conoce personalmente ni con la que nunca se haya hablado para decir un simple "hola" o "adiós" y sólo se la conozca de vista por compartir el mismo espacio que tú (ya sea estudiando en la misma universidad, haciendo deporte en el mismo gimnasio o trabajando en la misma empresa). Da igual todo, lo único importante para los cotillos/chismosos es cotillear sobre la vida de los demás. Y hacerlo importando un carajo el conocerlos o no.

Primera conclusión: cotill@ habla de quien sea, le conozca o no.

Entre los cotillos/chismosos están los que lo hacen públicamente para que todo el mundo se entere (incluido el interesado). Esta subespecie tiene, por lo menos, valentía porque lo hace de manera que te enteres de lo que dicen de ti para que puedas, al menos, defenderte. Véase el ejemplo de las acusaciones de que Obama no nació en Estados Unidos. Al hacerse público dichas acusaciones se pudo defender. Por lo tanto, esta gente demuestra valentía por decir las cosas a las claras y dejar que te enteres para darte la posibilidad de defenderte.

Aunque eso sí, no quiero que me malinterpretes puesto que no les apoyo en absoluto ya que que no se tiene ningún derecho a hablar de la vida de los demás, simplemente digo que al menos demuestran cierta valentía. Pero de estos hay muy pocos, poquísimos. La inmensa mayoría (un 99%) pertenecen al grupo de los cobardes. Los que pertenecen a este segundo grupo son los peores. Son los que hablan de ti a tus espaldas....alguien que hace eso es porque quiere cotillear a tu costa difundiendo vete tú a saber qué mentira. La gente que no va de frente suele ser falsa y muy mentirosa, que se escuda en el hecho de que no te enteras de lo que se está diciendo de ti para decir cualquier cosa (cualquier cosa que sea mentira, claro está). Si se tiene la poca vergüenza de hacer lo que acabo de decir, hazlo con pruebas que sustenten lo que dices y si no tienes pruebas te callas la p... boca porque yo no soy quien debe demostrar lo que tú dices de mí sino  que debes de ser tú mismo quien demuestre lo que dices de mí, pues cuando dices algo debes saber que las cosas no se dicen alegremente por decir sino que se deben argumentar y  mostrar pruebas si vas a decir algo de terceras personas. Llegados a este punto, ¿a nadie le ha dado por pensar que puede ser mentira?¿que la persona que tiene delante le está mintiendo en su cara? Pues no, la gente hace un acto de fe (no lo hacen con respecto a la religión pero aquí sí lo hacen...¿quizás porque llevan un cotilla en su interior?) y se lo creen todo a pies juntillas. Vamos a ver, las cosas se demuestran con pruebas y si no las hay pues hay muchas papeletas de que haya mucha mentira y/o falsedad en lo que te están contando.

Con respecto a lo anterior hay una frase que dice: "Lo que has oído de mí podría ser cierto, o tal vez podría ser tan falso como la persona que te lo ha contado."

Así que toma nota.

Segunda conclusión: el cotill@ suele decir muchas mentiras.

El modo de actuar que acabo de describir no suele ser corriente entre la gente que te conoce personalmente y es buena gente sino que es muy habitual entre la gente que o es muy mala (y te quiere destruir a costa de difundir falso testimonio en contra tuya) o sólo te conoce de vista por compartir el mismo espacio que tú (ya sea estudiando en la misma universidad, haciendo deporte en el mismo gimnasio o trabajando en la misma empresa).

De los dos grupos que acabo de mencionar, los primeros son de lo peor porque no se cortan un pelo en mentir y mentirte mientras te miran a la cara con tal de decir cosas que no son de terceras personas. Pero eso sí, tampoco pierdas de vista a los segundos. Esta gente también es de lo peor. No te conocen absolutamente de nada, no te conocen personalmente, desconocen lo que te gusta o deja de gustar, desconocen de qué pie cojeas, desconocen tantas y tantas cosas pero aún así tienen que hablar y cotillear de ti. Esto acarrea varias consecuencias. Algunas directas y otras indirectas. Entre las consecuencias directas se encuentran algunas como que se digan mentiras o se cuelguen determinados carteles que, obviamente, por no conocerte personalmente, van a ser totalmente falsos. Entre las consecuencias indirectas se encuentran que gente que sólo te habla para decirte "hola" o "adiós" o para hacer comentarios banales sobre el tiempo que hace o chorradas del estilo les llegue esos cotilleos totalmente falsos. Y ¿esta gente qué hace? Tirarte indirectas acerca de esos cotilleos (recordemos que son totalmente falsos) que tú te quedas pensando para tí: "¿y esto a santo de qué viene?".

Tercera conclusión: la gente se traga cualquier cosa, aunque sea mentira.

A partir de aquí nos podríamos extender hasta el infinito y más allá porque entre todas esas mentiras que se utilizan en los cotilleos y carteles colgados a terceras personas (siempre con COSAS ERRÓNEAS y TOTALMENTE FALSAS) se pueden decir muchas cosas. Pero me voy a centrar en una. Pondré un ejemplo para ilustrarlo mejor. Resulta que una persona, a la que llamaremos Ana, va a un gimnasio en el que solo habla "hola" y "adiós" con los monitores y la gente de recepción. Esa persona no habla con absolutamente nadie más de ese gimnasio. Nadie conoce personalmente a Ana, sólo de vista. En el caso de los monitores conocen a Ana porque va a sus clases. Y ésta saluda cuando se cruza con los monitores. La gente que está en recepción conocen a Ana porque cada equis tiempo tiene que pagar el gimnasio para seguir haciendo deporte. Y ésta también saluda a los que están en recepción. En una situación como ésta, no sé vosotros, pero yo lo que diría es que en ese gimnasio no existe ni una sola persona con capacidad para hablar sobre Ana ni sobre su vida ni sobre nada porque NO CONOCEN ABSOLUTAMENTE NADA acerca de Ana. ¿Tú crees que esa gente, que solo conocen a Ana por compartir el mismo espacio que ella (en este caso un gimnasio) tienen derecho a hablar sobre su vida aunque NO CONOZCAN ABSOLUTAMENTE NADA? No sé qué responderás pero si dices que sí me demuestras que eres exactamente igual que esa gente. Pero si dices que no...entonces eres de mi misma opinión. Pues bien, resulta que tenemos a Pepita que se dedica a hablar sobre la vida de Ana. Sobre sus gustos y preferencias. Sobre su vida sexual. Y dice que si es homosexual y vete tú a saber qué más. Pepita se suele rodear de una serie de personas que bien podría ser sus hijas (al menos por edad), siempre la verás con esas mismas yogurinas (aunque de vez cuando hable con otro par de personas) que, casualmente,  es con el que suele suele cotillear acerca de Ana, esa persona que sólo conoce de vista. Hasta ha ido con el cuento a los monitores. Algunos de ellos se permiten el lujo de hacer alusiones en mitad de la clase que estén impartiendo sobre esos cotilleos que le ha transmitido Pepita, y mientras hacen esas alusiones miran a Ana...Ana tiene que aguantar esos comentarios por parte de esos monitores sin saber muy bien a santo de qué vienen puesto que desconoce cómo ha surgido todo...recordemos que Ana va a un gimnasio sólo para hacer deporte, el resto de la gente sólo la conoce de vista y DESCONOCE ABSOLUTAMENTE TODO ACERCA DE SU VIDA y lo único que habla es para decir "hola" y "adiós" con los monitores y la gente de recepción. Teniendo en cuenta esto y que, casualmente Ana es hetero, ¿por qué tiene que aguantar que se digan ciertas cosas a sus espaldas y que haya ciertos monitores que se dediquen a hacer ciertos comentarios en plena clase que, a mi parecer, no sólo están totalmente fuera de lugar sino que además están totalmente de más? La gente que se dedica a hacer eso con Ana, el tacharle de poseer una conducta sexual que no tiene, podría esconder una homosexualidad reprimida  En el caso de Pepita no me extrañaría porque tiene pinta de tener una edad con la que bien podría haber nacido en la época de Paquito (quizás te suena más Franco) y le decían que la homosexualidad era mala y debido a eso ha reprimido su orientación sexual teniendo que tachar de gay en la actualidad a gente que ni conoce porque es una cobarde (por haber reprimido su propia homosexualidad y sentirse inferior a otros homosexuales que hoy en día sí que manifiestan su orientación) y desea llamar la atención por medio de estas acusaciones y así sentirse algo que en realidad no es.

CUARTA CONCLUSIÓN: Hay gente muy reprimida que, al intentar ocultar su auténtica orientación, tacha a los demás de cosas que no son pero que sí lo es esa gente.

Y la conclusión definitiva es que hay un gran número de personas que son unos cotill@s y suelen decir muchas mentiras. Hay quien les escucha y se traga cualquier cosa, aunque sea mentira. Entre esa gente cotill@ hay unas cuantas personas que están muy reprimidas y que tacha a los demás de cosas que no son pero que sí lo es esa gente que cotillea.

Ahí queda eso.







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